Navegación, la discreta pestaña que cambia la mirada de Windows 8.1

Navegación, la discreta pestaña que cambia la mirada de Windows 8.1
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Windows 8.1 Release Preview ha traído bajo el brazo varias características demandadas por la comunidad de usuarios del sistema operativo de Microsoft: el tan cacareado botón inicio, arranque directo en el escritorio, mejoras en multitarea, y racionalidad en el uso de configuraciones con varios monitores, entre otras. También nuevas posibilidades de personalización para el entorno Modern UI.

Si desplegamos la Charms Bar desde la pantalla-mosaico y optamos por el último control, Configuración, se mostrará la banda lateral derecha para Cambiar la configuración del PC. En su menú encontraremos la opción Personalizar, pero resulta que ahí se pueden cambiar fondos y colores, pero no el comportamiento del escritorio. ¿Dónde están entonces los ajustes? En una discreta pestaña denominada Navegación... dentro del entorno clásico. Veamos qué podemos hacer con ella.

h2. Cambiar el comportamiento de Windows 8.1

Para acceder a la pestaña Navegación debemos situarnos en el escritorio clásico. Un método para hacer esto es pulsar la secuencia de teclas [Windows]+[D], pero podéis emplear el que más os guste. Una vez allí, en una zona limpia de la barra de tareas, marcaremos ésta con el botón derecho del ratón, dando lugar al despliegue de su menú, tal y como se aprecia en la imagen siguiente.

Menú de la barra de tareas de Windows 8.1

Entre los distintos ítems que ofrece el menú, debemos seleccionar el último: Propiedades. Con esta acción se desplegará la ventana Propiedades de la barra de tareas y navegación. Ya estamos cerca de nuestro objetivo. De las cuatro pestañas presentes en esta ventana emergente, seleccionaremos Navegación. En la imagen, la situada a la derecha en la fila inferior.

Propiedades de la barra de tareas y navegación

Es aquí, en la pestaña Navegación, donde vamos a poder cambiar aspectos del sistema operativo que antes sólo eran posibles mediante la modificación del registro en algunos casos, o confiando en aplicaciones de terceros en otros.

Opciones de la pestaña Navegación

h3. Navegación en esquinas

Bajo el apartado Navegación en esquinas, tenemos tres casillas de verificación que están activadas por defecto.

h4. Esquina superior derecha

La primera sirve para activar/anular que se muestre la Charms bar cuando apuntamos con el dispositivo señalador la esquina superior derecha.

Anulando esta opción tendremos menos problemas cuando queramos actuar sobre los tres controles de una ventana maximizada. Cualquier cambio en este sentido entra en funcionamiento tras pulsar el botón Aplicar.

h4. Esquina superior izquierda

Con la segunda casilla de verificación actuaremos sobre el comportamiento de Windows 8.1 cuando marcamos con el dispositivo señalador en la esquina superior izquierda. Marcado, la opción por defecto, permite cambiar entre las aplicaciones más recientes cuando pulsamos sobre esa esquina.

Sin marcar, anulará este comportamiento. Podemos comprobar el efecto de este control sin necesidad de cerrar la ventana de Propiedades de la barra de tareas y navegación. Actúa de inmediato tras pulsar el botón Aplicar.

h4. Mostrar PowerShell

La tercera opción de Navegación en esquinas sirve para alternar entre la consola y PowerShell en el menú del botón Inicio, el que se obtiene con el botón derecho del ratón sobre el logotipo de Windows (botón inicio), o mediante la combinación de teclas [Windows]+[X].

MARCADO

Mostrar PowerShell

DESMARCADO

Mostrar Consola

h3. Pantalla inicio

En la sección Pantalla Inicio tenemos seis casillas de verificación:

h4. Escritorio clásico al iniciar sesión

Sí, aquí está una de las opciones más demandadas, iniciar sesión directamente en el escritorio clásico en vez de en la pantalla-mosaico. Marcando el primer checkbox de esta sección, en el próximo inicio de sesión tendremos el escritorio clásico sin pasar por la pantalla de tiles.

h4. Mostrar mi escritorio en segundo plano de Inicio

Esta opción muestra el fondo de escritorio asignado al entorno clásico a la pantalla de tiles, consiguiendo de esta forma suavizar visualmente el cambio entre el entorno Modern UI y el clásico cuando alternamos entre ellos.

Windows 8.1, configuración doble monitor

Doble monitor: Pantalla Inicio en la pantalla principal

h4. Mostrar siempre la pantalla Inicio en la pantalla principal

El tercer checkbox de la sección es aplicable a las configuraciones con varios monitores. Si está marcado, la pantalla que tengamos asignada como principal mostrará la pantalla de tiles cuando pulsemos la tecla [Windows].

h4. Mostrar Aplicaciones en vez de la pantalla Inicio

La cuarta casilla de verificación permite, cuando está marcada, que al pulsar sobre la tecla [Windows] en vez de saltar a la pantalla de tiles el sistema conmute con la pantalla Aplicaciones, ahorrándonos el paso de ir primero a la pantalla-mosaico y pulsar sobre el control de la flecha inferior para acceder a dicha pantalla. También tiene efecto sobre el correspondiente control de la Charms Bar (logotipo de Windows).

Pantalla Aplicaciones de Windows 8.1

h4. Buscar en todas partes

El quinto checkbox está habilitado si el cuarto está previamente marcado y su efecto consiste en que, al realizar un búsqueda desde la pantalla aplicaciones, esta búsqueda extenderá su ámbito más allá de la propia pantalla.

h4. Las aplicaciones de escritorio primero

Con el último checkbox marcado, cuando el criterio de ordenación de la pantalla Aplicaciones sea Ordenado por categoría, las primeras aplicaciones que veremos serán las que funcionan en el escritorio clásico y no las del entorno Modern UI.

h2. Pestaña Navegación, conclusiones

En Windows 8.1 Microsoft ha recogido muchas peticiones de los usuarios, actitud que debemos valorar de forma positiva siempre. El fabricante tenía una fórmula de trabajo en mente cuando se planteó el diseño de Windows 8, y los usuarios la propia.

Windows 8.1 ofrece posibilidades pasa satisfacer diversas formas de trabajar para contentar a una gran mayoría, evitando por otra parte que aplicaciones de terceros "toquen" su sistema. El empleo de cada posibilidad es un tanto personal, además de ir vinculada en parte, al tipo de máquina donde esté el sistema instalado.

Una tableta y un PC son aparatos distintos, e incluso dentro de cada ámbito, no es lo mismo trabajar con dos monitores grandes que uno pequeño. Mi consejo, el que me he dado a mí mismo, es no empecinarse en que Windows 8.1 sea un Windows 7 "tuneado". Tocando aquí y modificando allá podemos tener un sistema operativo adaptado a nuestros gustos y hardware. Es cuestión de probar.

Imagen | Ibrahim Iujaz En Genbeta | Windows 8.1. Primeras impresiones

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