No sé donde irá el 15M: le queda mucho recorrido, y precisamente por eso necesita tender puentes. Como en aquella novela de Priest, El Mundo Invertido, es toda una civilización que avanza lentamente. Como un caracol, con toda una metrópolis a cuestas. Van a cambiar el mundo de muchas formas. Pero de todas sus acciones, ninguna será tan bella como #stopdesahucios. - Carlos Sánchez Almeida
El ex alcalde socialista de Granada Antonio Jara fue elegido hace dos años presidente de Caja Granada en virtud de un acuerdo entre el PSOE y el PP.
El viernes, pocas horas antes de iniciarse la Conferencia Política del PSOE en Madrid, la policía de Interior, a las órdenes del candidato del PSOE por Zamora, cargaba contra los activistas del 15-M que pretendían impedir el desahucio de un hombre con el 100% de invalidez en la colonia rural de Caulina (Jerez).
El desahucio ya se ha producido. Las detenciones y la violencia policial para hacer cumplir la ley también. Desde el jueves se intentaba el desalojo pero la presencia del 15-M lo retrasó hasta el viernes, cuando acabó casi en una batalla campal, informa el diario El País. Según el relato de una persona presente en el desahucio, que ha publicado periodismohumano.com, a los policías "les daba igual todo":
Pegaban y pegaban y todo para entrar en la casa por la fuerza. Han arrestado a 11 personas y han conseguido echar a esa pobre familia de su casa, una gran estafa de los especuladores, de una culpable Caja Granada
¿Quién desahuciará a los políticos/cajeros que han especulado con el suelo en el mercado cautivo de la recalificación? ¿Quién desahucia del poder a los alcaldes y alcaldesas que le han llevado el "planito" al constructor para pintar de verde las casillas de la especulación? ¿Quién detendrá a los que han convertido España en el Monopoly de la especulación y la financiación irregular? ¿Quién detendrá a los saqueadores?
Políticos, cajas, bancos y constructores amigos del poder. Lo peor de lo peor pero tolerados por el regulador e inmunes a la intervención policial. Como la SGAE de los chanchullos que han tolerado durante años y años.
¿Quién enviará a la policía a las sedes de los partidos del Corruptódromo? ¿Quién desvelará el mapa del tesoro oculto? ¿Quién se hace responsable de hundir las entidades financieras? ¿Quién de haberlas reflotado, ellos dicen sanearlas, con dinero público para tapar sus miserias provocadas por una pésima y desvergonzada gestión?
¿Habrá estado Antonio Jara este finde en la Conferencia Política del olvido?. Sí, esa convención a la americana en la que Rubalcaba se ha olvidado de la promesa, en menos de dos meses, de hacer más proporcional el sistema electoral.
No podía ser, reformar el sistema electoral, estafa lo llama Cayo Lara, implica perder cuotas de poder. Algo que no pueden permitirse los amigos del candidato en Washington (necesitan una oposición leal) ni el propio partido, que tanto se confunde con las cajas de los desahucios. Esa propina en forma de desgarro social que nos deja la grosera fiesta del Monopoly en la que jugaron con España.
Es por lo que pasó en esa fiesta. Ahora más que nunca conviene conservar el extra gratis que la ley electoral concede a los partidos mayoritarios. Es necesario mantener la presión sobre los tribunales y no ser sensible a la demanda "un ciudadano, un voto".
Es fundamental mantener "esos diputados de más" - aunque sean injustos - que ayudan a garantizar o fortalecer los privilegios judiciales de dos partidos que no están únicamente unidos por su apoyo a la Ley Sinde.
Los politicastros tratan a los españoles como Santos Inocentes. Pero en la finca además de señoritos y tertulianos de casino hay cada día más desobedientes que ya no tragan con la farsa de los instalados de la partitocracia bancaria que ha saqueado España desde sus despachos.
Hoy, en el día que la Audiencia Nacional ha ordenado detener y amenazado con enviar a la cárcel a los indignados de Barcelona que perdieron las formas, la paciencia y la serenidad frente al Parlament, se hace más palpable que las togas políticas no ayudarán a evitar la explosión social.
Exigir un código de buena conducta a los indignados en un país asediado por los jinetes de la corrupción, el paro y los privilegios de la casta es digno de Yolande de Polastron, condesa y duquesa de Francia, antes de la revolución. Pero la mejor respuesta a los que han ocupado y saqueado el Estado es la resistencia pacífica. El monopolio de la violencia para ellos.
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