El 18 de junio de 2021 entrará en vigor una nueva política de Google Chrome que exigirá a los desarrolladores de extensiones que enumeren "en un lenguaje claro y fácil de entender" los datos que recopilan.
"La nueva política requiere que los desarrolladores certifiquen sus prácticas de uso de datos y que muestren esa información directamente en el listado de Chrome Web Store, para ayudar a los usuarios a comprender las prácticas de privacidad de una extensión".
Fecha límite: enero de 2021
Se trata de un paso más en el esfuerzo que lleva haciendo Google en los últimos años para que las extensiones de Chrome sean más seguras. Para ello, los desarrolladores tendrán que listar esta recopilación de datos por categorías.
Dichas categorías incluyen datos de identificación personal, salud, información financiera, ubicación, historial y la actividad de los usuarios. Se puede ver un ejemplo de desglose en la imagen inferior:
Otro punto importante es que los desarrolladores tendrán que comprometerse con esta nueva política, que prohíbe explícitamente la venta de datos terceros. Los creadores de extensiones ya pueden, a partir de este momento, comenzar a mostrar esta información (tienen, como hemos indicado, el 18 de enero de 2021 como fecha límite).
Además, Chrome se encargará de alertar sobre las extensiones que no cumplan esta política (puede que ofrezcan un plazo para que esto suceda, y acaben bloqueando a aquellas extensiones que no completen la transición).
"En el caso de los desarrolladores que aún no hayan facilitado información sobre privacidad antes del 18 de enero de 2021, se mostrará un aviso en sus listados de Chrome Web Store para informar a los usuarios de que el desarrollador aún no ha certificado que cumple con la política de uso limitado".
Es un paso importante, ya que en los últimos años ya hemos hablado (en muchas ocasiones) sobre los peligros que entraña instalar extensiones de las que no estamos completamente seguros de su procedencia.
