El organismo encargado de los campeonatos de primera y segunda división del fútbol español, la Liga de Fútbol Profesional, está empleando su aplicación móvil para espiar a bares y establecimientos que ofrecen la retransmisión de partidos. Por ello, la Agencia Española de Protección de Datos ha abierto actuaciones previas de investigación de oficio según han anunciado este lunes.
La aplicación oficial de LaLiga acumula, solamente en la tienda de aplicaciones Google Play de Android, más de 10 millones de descargas.
La asociación deportiva integrada por los clubes y las sociedades anónimas deportivas que participan en las categorías profesionales de la liga española de fútbol ha reconocido estos usos mediante un comunicado en el que aseguran que el "fraude" en bares, cafeterías y otros establecimientos públicos les suponen anualmente "una pérdida estimada de 150 millones de euros". Además, dicen, el usuario puede aceptar el uso o no del micrófono y la geolocalización por parte de LaLiga y aclaran que esta nunca accederá al contenido de la grabación.
Serias dudas sobre la legalidad
Para Carlos Sánchez Almeida, abogado especializado en delitos informáticos e internet y director legal de la PDLI, resulta "muy discutible" que se pueda considerar un delito contra la propiedad intelectual la retransmisión de partidos de fútbol. "Como se puede ver en la propia Ley de Propiedad Intelectual, las grabaciones audiovisuales de partidos de fútbol no son obra cinematográfica", explica en declaraciones a Genbeta.
El letrado señala que esta "nueva funcionalidad", calificada así por la propia Liga de Fútbol Profesional, tiene un problema fundamental.
"El tema es que el Reglamento General de Protección de Datos de la Unión Europea y la Ley Orgánica de Protección de Datos de España establecen que la recopilación de datos especialmente protegidos, como los relativos a infracciones penales, solamente se puede llevar a cabo en bases de datos de las administraciones públicas. Con lo cual, es muy discutible que la base de datos que genera LaLiga sea adecuada a la ley".
Almeida consideraba que la Agencia Española de Protección de Datos debía abrir una inspección de oficio, como ha hecho poco después de la conversación mantenida con este medio, y que al margen de ello los bares afectados por una denuncia de LaLiga podrían tomar medidas si en el procedimiento penal se está utilizando información que parte de la recopilación de información que hace la aplicación.
Las alarmas saltaron este domingo cuando un tuit de Jorge Morell Ramos, experto en derecho y tecnología, lo explicaba: "Si aceptas, la app de LaLiga hace uso de tu micro y geolocalización para detectar bares y cafeterías que emiten fútbol sin pagar la licencia correspondiente. Tratamientos de datos que convierten a tu móvil en chivato". La información surgía de la abogada Esther Botella tras la consulta del desarrollador Juan Carlos FM, indicaba la letrada en Twitter.
Las infracciones muy graves que contempla el Reglamento General de Protección de Datos pueden ser objeto de una sanción equivalente al 4 % de la facturación anual o un máximo de 20 millones de euros. Una posible infracción se consideraría "muy grave" según diversos factores, como por ejemplo la cantidad de personas afectadas, la magnitud de los daños causados o la intencionalidad.
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