Una duda que surge muy frecuentemente entre los usuarios de Windows 10 es cómo iniciar sesión sin contraseña, es decir, encendiendo el equipo y que este vaya directamente al escritorio, sin necesidad de mayor intervención por parte del usuario.
Microsoft sigue sin entregar una vía simple para conseguir esto, pero aun así es posible lograrlo accediendo a opciones ocultas del sistema. Tan solo debemos presionar el atajo Windows + R, escribir el comando netplwiz y presionar Enter. También podemos hacerlo como vemos en la captura inferior, escribiendo "netplwiz" directamente en la búsqueda de Windows 10.
Luego aparecerá una ventana como esta, en la cual hay que desmarcar la casilla "Los usuarios deben escribir su nombre y contraseña para usar el equipo", y luego presionar Aceptar. El equipo nos pedirá, como medida de seguridad, que introduzcamos nuestra actual contraseña para confirmar nuestra identidad. Sólo tendremos que volver a pulsar en "Aceptar".
Finalmente solo queda reiniciar el equipo, y listo. Windows 10 ya no nos pedirá una contraseña para iniciar sesión al encender el PC.
Sin embargo, Windows seguirá solicitando la contraseña si el equipo sale de un estado de suspensión. Para evitarlo basta con acudir a "Configuración", "Correo electrónico y cuentas" y dentro de "Opciones de inicio de sesión" marcar la opción "Nunca" en la sección "Requerir inicio de sesión".
Pasar a una cuenta local
Y aun así, si nuestra cuenta de Windows está vinculada a una cuenta Microsoft no se nos permitirá eliminar por completo el uso de contraseña (y esa contraseña será siempre la misma que la de cuenta Microsoft), y por ende, esta se solicitará cada vez que bloqueemos el equipo usando las teclas WIN + L.
Para poder usar una cuenta totalmente libre de contraseñas, debemos convertirla en una cuenta local, lo cual se puede hacer yendo a Configuración > Cuentas > Tu cuenta > Iniciar sesión con una cuenta local en su lugar.
Una vez completada la transformación hacia cuenta local, hay que regresar a Configuración > Cuentas > Opciones de inicio de sesión, hacer clic en el botón "Cambiar", ingresar nuestra contraseña actual, y cuando se nos pregunte por la nueva contraseña hay que dejar todos los espacios en blanco.
Habiendo hecho esto último nos aseguraremos de que Windows no nos pida jamás una contraseña para iniciar sesión, ni siquiera luego de bloquear el equipo.
No está de más decir que al no requerir constraseña corremos el riesgo de que cualquier persona pueda usar nuestro equipo y acceder a nuestros datos, incluso para fines maliciosos, por lo que hay que pensarlo dos veces antes de desactivar el uso de contraseñas para iniciar sesión.
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