Acceder a nuestro ordenador de forma remota puede ser una buena solución en algunas circunstancias. Si bien existen servicios como TeamViewer para hacerlo, es posible conectarse de forma remota a través de Google Chrome, a través de una sencilla extensión, y una aplicación, en el caso de que el dispositivo sea móvil.
Procede pues, explicar cómo puedes acceder a un ordenador de forma remota, desde otro PC o desde cualquier smartphone con Android o iOS. El proceso de configuración demora apenas unos minutos, y permite manejar el PC original desde cualquier parte en la que tengamos conexión.
Cómo configurar el acceso remoto
Chrome Remote Desktop es la solución de Google para controlar un ordenador de forma remota. Tanto en macOS como en Windows, el proceso para configurar el acceso remoto desde Chrome es el mismo. Es necesario tener Chrome instalado, y escribir la siguiente dirección en la barra de direcciones.
remotedesktop.google.com/access
Una vez hayamos accedido a esta dirección, tendremos que descargar el archivo necesario para que el proceso funcione. Del mismo modo, es recomendable instalar la extensión de Chrome, que nos abre un acceso directo al proceso.
La interfaz no puede ser más sencilla, ya que está dividida para ser nosotros los que recibimos asistencia desde otro móvil o PC, o que sea la otra persona la que recibirá nuestra asistencia. En el primer caso, podremos generar un código para que la persona en cuestión se conecte a nuestro PC. En el segundo, seremos nosotros los que deberemos introducir dicho código de acceso para acceder a su ordenador.
Para acceder desde un teléfono móvil, tendremos que crear nosotros el código, así que es recomendable apuntarlo en algún lado para no olvidarlo.
Accediendo a un PC de forma remota
Si queremos acceder a un PC de forma remota, como te adelantamos, vamos a necesitar un código. Desde el ordenador "origen" debemos generar dicho código, para introducirlo en el ordenador que proporcionará la asistencia. Una vez introducido el código, podremos gestionarlo de forma remota. Esto se traduce en que cada paso que demos desde el escritorio remoto, se reflejará en el ordenador que está siendo manejado.
¿Qué sucede si queremos realizar este proceso desde un móvil? Para realizar este proceso, será necesario descargar las aplicaciones de iOS o Android, que, a pesar de no contar con las mejores valoraciones, en nuestro caso han funcionado a las mil maravillas.
El funcionamiento es prácticamente idéntico al de acceder desde un PC. No tendremos más que introducir el código que hemos establecido (no el generado) para empezar a controlarlo. Inevitablemente, manejar la interfaz desde el móvil es bastante más complicado, aunque, con un poco de maña y paciencia, podemos gestionar cada rincón del ordenador. Si quieres detener la sesión remota, no tienes más que pulsar en 'desconectar'. En la parte inferior de la pantalla verás el aviso, por lo que no tiene pérdida.