Como comentaba en el anterior artículo al respecto, las redes sociales tienen intención de ponerse al día, pero cómo. Con la utilización de OpenID y llevando la relación usuario-comunidad más allá.
Para empezar, siendo propietario de tus propios contactos, pudiendo establecer una relación XFN con ellos desde la fuente de tales datos y acceder a las hCard de los mismos. Siendo personalizable desde la red destino. ¿Quiero este usuario en todas mis redes o únicamente en las que yo desee?
Obviamente, la privacidad de mis datos estará en mis manos, siendo yo quien elija qué datos serán obtenidos desde la red social en cuestión, por ejemplo, mediante el uso de OpenID.
Unificación mediante de OpenID y la red social con el concepto de Myself Online.
Y, inequívocamente, a través el uso de unos estándares y protocolos abiertos que nos permitan normalizar la comunicación entre los distintos servidores y servicios.
El objetivo no es otro que la monetarización de las redes sociales, que a través de este proceso, harán de las mismas unas aplicaciones más accesibles a cualquiera que desee entrar y por tanto, mayor facilidad para rentabilizar los propios usuarios. Tal vez sea el lado oscuro de las mismas, pero es la realidad: si no me gusta esta red social, me voy con mis contactos a otra red. Y de un modo más sencillo, puedo llegar a ganar infinitos usuarios en cuestión de semanas.
Por el otro lado, el que prefiero observar, es la eliminación de redes cerradas donde al registrarte, ya estás atrapado, tú y tus contactos, como ocurre en las grandes redes sociales.
Tal vez sea algo utópico, pero creo sinceramente que llegará un día en el que con único registro (ya sea en un servidor OpenID o en una alternativa normalizada) podamos crear subredes sociales que migren de una a otra red con la sencillez con la que hacemos clic en un enlace. Tal vez...
