MS-DOS. Clásicos del software (I)

MS-DOS. Clásicos del software (I)
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Iniciamos en Genbeta una serie especial dedicada a los clásicos del software. Este primer artículo está dedicado a MS-DOS, un sistema operativo que lleva ya más de 30 años entre nosotros. Cuando apareció en 1981, algunos de vosotros no estabais ni en proyecto, otros erais aún unos niños y los más veteranos aprendimos con él.

Quién iba a pensar entonces que 4.000 líneas de código escritas en ensamblador, con unos requisitos de 12 KB de RAM, se iban a convertir en uno de los mayores éxitos comerciales del pasado Siglo XX. Bueno, hubo alguien que sí lo intuyó: Bill Gates y su socio Paul Allen, los fundadores de Microsoft.

MS-DOS, el camino del éxito

A finales de los 70 el sistema operativo más extendido para computadoras personales era CP/M, desarrollado por Gary Kildall. CP/M podía ejecutar el código del Intel 8080 (8 bits), que había salido al mercado en 1974.

Manual de CP/M

Imagen | Dan Century

La aparición del Intel 8086 (16 bits) hizo necesario nuevos sistemas operativos. Por un lado Gary Kildall (Digital Research) estaba trabajando en la evolución de CP/M (CP/M-86) y Tim Paterson (Seattle Computer Products, SPC) desarrollaba el sistema operativo 86-DOS, también conocido como QDOS (Quick and Dirty Operating System).

Por su parte IBM quería sacar al mercado un ordenador personal basado en el Intel 8086, pero sin invertir en el desarrollo de un sistema operativo. El candidato en ese momento era CP/M-86, aunque iba muy retrasado.

Altair 8800

Altair 8800

Imagen | Wikipedia

En 1975, Bill Gates y Paul Allen habían desarrollado un intérprete BASIC para el computador Altair, (fabricado por Micro Instrumentation Telemetry Systems (MITS) y basado en el Intel 8080). Microsoft, que estaba colaborando con IBM en el desarrollo de un BASIC, conocía el problema del CP/M-86.

Adquirió entonces los derechos para la explotación comercial del 86-DOS a SPC y negoció en secreto, ocultando la procedencia del sistema operativo a IBM, que al final se decantó por el producto ofrecido por Microsoft. Éste compró finalmente a SPC el sistema operativo y contrató a Tim Paterson.

La gran jugada de Bill Gates fue convencer a IBM para que Microsoft conservara los derechos de comercialización del sistema operativo y vender únicamente licencias. Esto permitió que el sistema se vendiera en los IBM bajo el nombre PC-DOS, y Microsoft suministró el mismo sistema a otros fabricantes bajo el nombre MS-DOS.

Bill Gates -1985

Bill Gates – 1985

Imagen | Andreas Pizsa

En agosto de 1981 salió al mercado el IBM PC con un Intel 8088, 256 KB de RAM, disco flexible de 160 KB y PC-DOS (MS-DOS 1.0). Las distintas versiones fueron apareciendo para adaptarse a los avances en el hardware. La última fue la 8.0, como parte de Windows Me.

Algunos hitos en la evolución de MS-DOS

MS-DOS 1.0 era el 86-DOS con algunas modificaciones. Era compatible con CP/M, el sistema de archivos usaba FAT (File Allocation Table), manejaba discos flexibles de 160 KB, procesaba archivos por lotes (.BAT) y requería 12 KB de RAM. El soporte para discos de doble cara no llegó hasta la versión MS-DOS 1.1 de 1982.

MS-DOS 2.0 elevó hasta los 32 MB el tamaño soportado en los discos duros. Agregó el particionamiento de disco. Con esta versión, que multiplicó por cinco el número de líneas de código respecto de la primera, apareció el archivo config.sys y el spool de impresión.

En la serie 3.0 (1984), se duplicaron las líneas de código, pasando a 40.000. Con ella llegaron los discos virtuales en RAM. Con la versión 3.1 apareció el soporte de red. Con la 3.2 ya manejaba discos de 3,5 pulgadas. Hubo que esperar hasta 1987 para ver la versión 3.3.

DOSSHELL

La versión 4.0 apareció en 1988, con soporte para particiones de 2 GB. También vimos en MS-DOS 4.0 por primera vez DOS Shell, un administrador de archivos gráfico.

MS-DOS 5.0 llegó en 1991. Aquí el sistema ya era otra cosa, disponía de administrador de memoria extendida y permitía cargar los drivers en la memoria alta. Con esta versión aparecieron dos nuevos comandos muy útiles: unformat y undelete para recuperar información, y el editor EDIT.

MS-DOS 6.0 (1993) administraba mejor la memoria, incorporó la compresión (DOUBLESPACE), y desfragmentación de discos. DOUBLESPACE (denominado DriveSpace después), dio muchos problemas, tanto técnicos como legales.

Los primeros se solventaron en la versión 6.2 del mismo año. Cuando Microsoft perdió la demanda frente a Stac Electronics por violación de patentes en el uso de DOUBLESPACE, creo su propia utilidad de compresión en la versión 6.22 (1994).

Vídeo | YouTube

Según las fuentes, se estima que en 1996 Microsoft había vendido entre 180 y 190 millones de copias de MS-DOS, tanto de las licencias de IBM (PC-DOS), como por las de otros fabricantes. MS-DOS 7.0 apareció con Windows 95 y la última versión 8.0 con Windows Me.

El primer contacto con MS-DOS… un desastre

Mi experiencia con computadoras personales no era mucha cuando adquirí un clónico 286 a 12,5 MHz y un “mega” de RAM. El artefacto en cuestión venía con MS-DOS 3.2, que había instalado el vendedor sacando de la carpeta DOS (y colocando en el raíz), los archivos que se ejecutaban desde config.sys y autoexec.bat.

En casa había experimentado con un Sinclair ZX Spectrum de 48 KB. Posteriormente compré un Amstrad CPC 664, gobernado por CP/M. En el trabajo manejaba un par de programas en un potente Olivetti M20, cuyo sistema operativo PCOS apenas tocaba.

Quiso el destino y Mr. Murphy que el equipo llegara a casa un viernes por la tarde, sin el manual del sistema y sin los discos de instalación. En la noche de mi particular viernes negro empecé a investigar con la máquina, que traía instalado uno de los programas más útiles en aquellas fechas: XTree.

XTree funcionando bajo MS-DOS

En un disco duro de 20 MB cada KB contaba, y examinando con XTree su contenido, me di cuenta que allí había muchas cosas que no se ejecutaban y no necesitaba para nada. Sí, la parte del DOS que habían sacado de su carpeta.

Presto y solícito borré todo el contenido “basura”. En el siguiente arranque el equipo ya no funcionó. Tras un amargo fin de semana, el lunes fui al servicio técnico. Las risas no fueron a más por su olvido del manual y los discos.

Me fijé en cómo arreglaron el problema y desde entonces nunca más he necesitado de un servicio técnico. Es muy probable que aquel incidente haya sido el responsable de mi pasión por los sistemas operativos.

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