El caos de las horas extra en España: el Gobierno controlará más a las empresas en un país donde trabajar de más es común

Contratado a 20 horas, trabaja más del doble y ni siquiera ficha las horas de entrada y de salida. Esta es una realidad que el Gobierno quiere solucionar

Jonathan Velasquez 4mta Dkjuag Unsplash
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Hace unos días, el Ministerio de Trabajo de España, liderado por Yolanda Díaz, anunciaba su intención de mejorar el registro que las empresas tienen que hacer de las horas en las que su plantilla trabaja.

Este sistema lleva años en marcha y mucho se ha hablado de cómo muchas firmas tienen trucos y bazas propias para engañar al sistema, obligando a su plantilla a echar más horas, mientras, de cara a la administración, están siguiendo las normas y respetando los derechos laborales.

Concretamente, la obligación para las empresas de registrar la hora de entrada y salida, así como los descansos de los empleados, entró en vigor en mayo de 2019.

De todos modos, a día de hoy siguen saliendo historias de empresas que engañan para manipular los sistemas. O hay empresas que todavía no tienen ningún tipo de sistema implementado.

Alan es cocinero en una sidrería asturiana, tiene un contrato de media jornada aunque suele trabajarla entera y a veces incluso más de las 40 horas semanales, sobre todo en verano. ¿Cómo hace su empresa para sortear ese control? Dice Alan que él no ficha ni firma nada al entrar y salir. Solo firma al final de mes un documento donde se indican los días del mes que ha trabajado.

Es conocido que mucha gente hace horas de más

Un gran ejemplo fueron las llamadas Big Four (las cuatro consultorías Deloitte, PwC, KPMG e EY), las cuatro grandes consultoras a las que el Gobierno cazó el pasado año y para lo que usó un software con el que corroborar las constantes sospechas y acusaciones sobre las largas jornadas laborales que los trabajadores están prácticamente obligados a cumplir.

Pero no solo pasa en estos gigantes económicos. Muchas empresas, de diferentes sectores, lo hacen. Han encontrado formas de engañar al sistema. Es casi vox pópuli. Probablemente conozcas a alguien en esta situación.

De hecho, en abril de 2023 se anunciaba que más de 11.000 empresas habían sido sancionadas el año anterior por irregularidades en el control del tiempo de trabajo de sus plantillas y que esa cifra se traduce a una de cada tres que recibieron la visita de la Inspección de Trabajo por este motivo.

Dicen desde Wolters Kluwer que las infracciones más habituales relacionadas con el registro horario son las siguientes, de acuerdo con información del Ministerio: primero, la no implementación de un sistema adecuado para cumplir con la normativa.

En segundo lugar, las irregularidades relacionadas con la presentación de informes confusos, documentación incompleta, o falta de fichaje del personal que teletrabaja o que viaja habitualmente.

Trucos para engañar al sistema

El País recoge hoy testimonios de personas del sector servicios que hablan de cómo sus empresas tienen trucos para engañar al sistema y, realmente, si te pones a buscar información al respecto, vas a encontrar que en los últimos años, a pesar de la idea del Ministerio de Trabajo de controlar que los horarios se respetan, hay mucha información que apunta a lo contrario.

Si entras en foros varios típicos de España vas a encontrarte con muchos testimonios de personas que trabajan horas de más y que no saben cómo hacer para atajar este abuso.

Hay gente afirmando que han visto a gente de su empresa manipular la información de salida si un trabajador echa horas de más y otras personas diciendo que les hacen firmar un horarios falso.

Incluso, en internet puedes encontrar información de empresas electrónicas explicando cómo se puede falsear el fichaje desde una app de control horario, manipulando fecha y la hora del fichaje, gracias apps que permitan guardar los marcajes cuando no hay cobertura de datos para guardar el fichaje como realizado en la hora que muestra el teléfono móvil en ese momento y evitar los controles en la nube, por ejemplo.

En Genbeta | Un estudio compara qué supone trabajar cuatro días con hacerlo cinco o seis: cambia mucho nuestra relación con la empresa

Imagen | Foto de Jonathan Velasquez en Unsplash

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