Si te encuentras esta citación policial urgente en tu correo, no entres en pánico: la Policía Nacional ya la ha desmentido

  • Esta vez hemos querido analizar con humor esta clase de e-mails porque es importante sentarnos un momento a pensar y no dejarnos agobiar por los ciberdelincuentes

  • Bueno, por eso... y porque nos lo han puesto muy fácil

La policía
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Abro la Bandeja de Entrada y tengo un e-mail esperándome con el título "Of: ref : sobre ti importante". Clico. Compruebo que no tiene texto alguno, pero sí un archivo adjunto denominado 'CITACION.P1 (1) (1) (1).jpg'. Lo abro. Y me aparecen los símbolos del Ministerio del Interior y de la Policía Nacional y debajo el título de 'CITACIÓN POLICÍAL' (sic).

Se me notifica amablemente que el Sr. Marc de Mesmaeker, 'Comisario General de la Policía Federal' y nuevo director de la Europol, ha mandado que se me envíe esta citación para comparecer, y que si no respondo a la misma, se notificará a toda una serie de altos cargos de la policía española para que vengan a detenerme. Está claro que toda esta gente no sabe delegar en los subalternos.

¿De qué delito se me acusa? Bueno, pues esta parte es poco graciosa, la verdad: "pornografía infantil, exhibicionismo, pedofilia y ciberpornografía". Me citan una serie de leyes que deben ser muy pertinentes para el caso y se me da 72 horas para responder. Ya la hemos liado, porque llevaba varios días sin consultar esta cuenta. Ya deben estar los GEOs a punto de entrar al asalto en mi casa.

Citación No es que haya escaneado el documento con mala calidad. Es así como nos llega.

Pero que no cunda el pánico. Veamos cuándo y dónde tengo que presentarme en comisaría… uhm, por aquí no está, por aquí tampoco… vaya, pues no lo pone. Yo pensaba que el objetivo de una citación es precisamente ése. Ah, no, que me piden dar explicaciones por e-mail, vale. Y al e-mail del Ministerio del Interior, nada menos… —que es una dirección de Gmail, nada menos—.

Será una errata, pienso. Mientras pienso qué hacer al respecto, me da por consultar las leyes que me acusan de haber vulnerado, a ver si indican la pena que conlleva. Veamos, "artículo 372 del Código Penal"… tiene que ver con el tráfico de drogas. "Ley 390-1 del Código Procesal Penal"… bueno, se referirán al artículo 390 de dicho código (otra errata)… pero éste sólo regula cómo pueden contestar los imputados a las preguntas del tribunal. Ninguna referencia a los delitos imputados.

Definitivamente, debería escribir al director de Europol, el señor Mesmaeker, para hacerle saber la cantidad de errores que tienen en el documento. Pero cuando voy a buscar en Google cómo ponerme en contacto con él, descubro que nunca ha sido director de Europol, sólo comisario general de la policía belga, e incluso de ese puesto dimitió ya el pasado verano.

A ver si me voy a estar comiendo una estafa, oye. Me da por mirar desde dónde me enviaban el e-mail: parece una dirección institucional… de una universidad mexicana. Debe ser esto a lo que llaman 'cooperación entre instituciones'…

Un vistazo a…
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No me ha quedado claro… entonces, ¿es una estafa o no?

No es que albergase alguna duda a estas alturas (quedó todo bastante claro en cuanto eché un primer vistazo al documento y a su chapucera estética), pero una búsqueda rápida por Internet deja claro que se trata de una estafa recurrente que desde hace, al menos, año y medio vuelve a moverse cada pocos meses en redes y que la Policía Nacional ha desmentido ya en numerosas ocasiones:


¿En qué tengo que fijarme?

Incluso prescindiendo del hecho fundamental de que las citaciones oficiales jamás se realizan por e-mail, hay varias señales de alerta que sugieren que este documento podría ser parte de una estafa:

  1. Dirección de correo no oficial: El correo de contacto proporcionado es una dirección de Gmail, que normalmente no se utiliza para comunicaciones gubernamentales oficiales. La correspondencia oficial debe proceder de un dominio gubernamental.
  2. Lenguaje amenazante: El documento contiene un lenguaje amenazante en relación con acciones legales y detención inmediata, lo cual es a menudo una táctica utilizada por estafadores para crear un sentido de urgencia y miedo.
  3. Acusaciones sensibles: El documento acusa al destinatario de crímenes graves relacionados con pornografía infantil, lo cual es una táctica de intimidación común en las ciberestafas.
  4. Demanda de acción: Los estafadores a menudo exigen que el destinatario tome medidas inmediatas, como contactarlos por correo electrónico, lo que puede llevar a más intentos de estafa o solicitudes de información personal.
  5. Calidad pobre: Cuando el documento muestra un formato de mala calidad, errores tipográficos, mezcla injustificada de varios idioma, o una apariencia poco profesional, podría indicar una estafa.
  6. Solicitud de información personal: Si el documento pide información personal o sensible por correo electrónico, es una señal común de un intento de phishing.

Así que, si recibes alguna vez un mensaje como el anterior, sencillamente ciérralo, bórralo y olvídate del asunto.

Imagen | Marcos Merino mediante IA

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