Otro año más, Promusicae e IFPI han publicado sus informes sobre lo que aconteció en 2019 al mercado de la música grabada en España y a nivel mundial, y ambos dejan noticias más que positivas para la industria nacional e internacional.
En España, los ingresos de la industria han crecido un 22% según Promusicae. A nivel internacional, un 8,2% según IFPI. La cifra española puede no sorprender, pero es enorme, pues desde que el mercado tocó fondo en 2013, el crecimiento anual estaba siendo relativamente lento, con un 2,36% en 2018 y un 8,88% en 2017.
Cuando conocimos los datos de la primera mitad de 2019, ya mencionamos que, de seguir creciendo a ese ritmo en la segunda mitad del año, por cifras podríamos ponernos a la altura de la industria en 2007. Finalmente no ha sido así y se han alcanzado los números de 2008, lo cual no deja de ser un hito, pues es el año en que comenzó la crisis aquí y ha costado mucho llegar a ese nivel.
La industria alcanza los niveles de 2008, pero ni el 50% de 2001: la COVID-19 lo complicará todo
Entre 2015 y 2016, los ingresos del mercado digital superaron definitivamente a los ingresos del mercado físico. En 2019, tres cuartas partes de todo el mercado pertenecen ya a lo digital gracias al enorme crecimiento de todas las categorías de streaming. Sin embargo, este año llaman la atención dos hechos:
El primero es que el mercado físico haya vuelto a crecer considerablemente, un 7,2%, lo cual es superior a otros países de nuestro entorno. Y el segundo es que el creimiento del vinilo haya eclipsado a cualquier otra categoría física y digital, generando un 56,3% más de ingresos que el año anterior. A día de hoy el reparto de los ingresos de la venta física es de aproximadamente un tercio para los vinilos, y dos tercios para el CD.
Dejando de lado anécdotas, lo que ha hecho que el crecimiento llegue al 22,54% global es el gran papel que sigue jugando el streaming en nuestro país. Según Promusicae, hay más de 10 millones de españoles que utilizan servicios de streaming, y 3 millones cuentan con suscripciones de pago. El éxito de las suscripciones de pago es lo que más impulsa el mercado nacional, pues genera casi el triple que el streaming por publicidad, y el 53% de todo el mercado.
Para que el mercado siga creciendo así, hará falta, por tanto, que las suscripciones crezcan sobre el total de usuarios de streaming, algo que sería factible si no fuera porque Promusicae prevé que habrá más de 100 millones de pérdidas debido al coronavirus, lo que puede llevar a "perder de golpe 6 años, o más". Estiman pérdidas de, al menos, 40 millones en vinilos y CDs, y de 50 millones en las plataformas de streaming.
Unos datos que son un jarro de agua fría a un sector nacional que sigue estando muy lejos de su mejor cifra, la de 2001, de la que todavía no se ha alcanzado ni el 50%, y que necesitaba cuatro años al ritmo de 2019 para poder igualarla. Con esta crisis, es muy posible que el plazo de recuperación vaya a ser mucho más prolongado.
A nivel mundial, en el informe de IFPI se ofrece una foto muy completa de la industria, en el que vemos una tendencia similar a la de España, pero con unas cifras mucho más cercanas a las mejores que se muestran, de 2001. En ese sentido, en 2019 se alcanzaron los 20.000 millones de dólares, lo que pone de nuevo al mercado global al nivel de 2004.
Es un gran gráfico para observar el cambio de modelo en cuanto al reparto de ingresos del sector: desde el casi 100% de la venta física de 2001, pasando por el crecimiento de la venta digital de canciones, cuyo pico llegó en 2014, hasta la explosión del streaming en los últimos cuatro años.
